EL 13 DE LA SUERTE

Recién sonó el pistoletazo de salida que da ánimos para empezar la andadura del nuevo año.
Que tendrá que parece que la ilusión de muchos se mezcla con el fracaso de otros para hacer borrón de todo lo sucedido y volver como si nada hubiera pasado a lo cotidiano de cada día.

Atrás quedó un 2012 cargado de alegrías y algún que otro fracaso, aunque todo eclipsado con la llegada del pequeño Alejandro.

En lo deportivo he estado sin duda en un momento dulce, copando buenos resultados allá por donde mi tiempo me dejaba ir.
Quizás la euforia de tales laureles, me ha llevado a pensar que quizás con más........ podría llegar a......, aunque como pasa de costumbre en estos casos, la realidad te devuelve a tu silla, dejándote en un más que meritorio puesto que hay que luchar a diario por no perder.

Conocí a tanta y tanta gente allá por donde iba, que ya es imposible pasar desapercibido en cualquier municipio de los alrededores.
En esto del deporte siempre sueles conocer lo mejor de cada uno. La fatiga después de una prueba, te lleva a ser confesor y confesado con un sinfín de iguales a ti.

Ahora que veo como los trofeos van llenando los huecos que poco a poco van desapareciendo en la cochera, recuerdo ciertas charlas mantenidas con algunos más aventajados, en la que siempre el denominador común es el mismo, "Tendrás tantas y tantas historias, que un trozo de metal será lo único que consiga hacer que puedas recordarlas".


Quizás uno de mis mayores logros ha sido poder enganchar a mi hermana para esto de las competiciones, y en la misma medida, uno de mis mayores fracasos, no poder haber hecho lo mismo con mi cuñado...... Quién sabe, quizás este puede ser el año de arranque.

En este resumen del año no podría faltar el agradecimiento a mi entrenador, sin el cual nada podría haber sido posible, ni por supuesto a mi mujer, la cual aguanta estoicamente mis escapadas diarias y mi mala leche cuando las cosas no salen como uno quiere. A mi suegra, que alegra sus tardes con Alejandro cuando yo  tengo que ir a entrenar, o al padrino, que con sus ánimos ha hecho que el niño se inicie precozmente en esto del deporte. ´

Tendría que agradecer a tanta y tanta gente los favores recibidos que no habría página para poder recoger tantos nombres.


El 2013 lo terminé despidiéndome de todos ellos, y lo comencé saludándoles de nuevo. Un punto y seguido en el devenir de la vida.

Animo a todos los que en estos días por una u otras circunstancias lo están pasando mal.

Que este nuevo año sea para todos el año de la suerte y que cada uno la encuentre en la forma que mejor se adapte a sus pretensiones.

Nos vemos en la siguiente prueba.

FELIZ AÑO NUEVO.