LA PRÓXIMA, LOS 4 GRANDES

Los de siempre, afrontamos una dura jornada de sábado con el objetivo de subir los tres grandes de la zona norte de Cáceres.

La pedalada hasta Hervás se hizo a un ritmo no demasiado fuerte, sabiendo lo que nos esperaba era lo más lógico, pero justo al llegar al cruce, el ritmo empezó a incrementarse por momentos.

Poco a poco íbamos devorando km. haciendo que las suaves rampas de Honduras se convirtieran en insufribles por el alto ritmo al que íbamos ascendiendo.

Con muy buena hora llegamos a la cima, y el primer reto del día realizado.

Ya en la vertiente de la carretera del Valle, la cosa cambió. De la tranquilidad que teníamos, sin apenas transito por el Ambroz, pasamos al colapso total de la Gran Via del Jerte. Fulanos con prisas, que conduciendo bólidos feroces, te obligaban a tener 5 ojos, pero como por muchos ojos que tengas, siempre hacen falta más, en plena subida a Tornavacas, en una rampa que marcaba el 7%, un animaluco que conducía un autobús lleno de visitantes adictos a las sensaciones fuertes, me hicieron echarme a la cuneta, y por pocos centimetros no acabo pegandome un baño en la garganta. El Cuñao y Emi tuvieron más suerte y aunque rozándolos, lograron salir indemnes del percance.

Como estamos acostumbrados a estas movidas, seguimos subiendo como si el resto del mundo no fuera con nosotros, acabando por fin el alto que divide las regiones.

Mucho del trabajo estaba hecho, pero quedaba lo peor. Sin lugar a dudas subir Piornal a las 3 de la tarde era un postre demasiado pesado para barrigas poco acostumbradas a los dulces. Y como estaba escrito nos toco sufrir, unos más y otros un poco menos, pero al llegar a la fuente de la entrada, todos acabamos con los pies metidos en el pilón. Era eso o acabar derretidos bajo el sol.

Con las fuerzas un poco más recuperadas bajamos raudos y veloces a encaminarnos hacía el dulce y merecido descanso del sillón, con más hambre que las pirañas, dispuestos a zampar cualquier cosa que nos encontráramos en la nevera.

Ya el domingo, le comente al Cuñao y a Félix, la posibilidad de ampliar los tres grandes con la subida a el Torno, con su famosa cuesta de los muñecos. Me miraron con cara de pocos amigos, pero....... no hay cosa que no se nos meta en la cabeza y no hagamos...... Eso sí, tendrá que esperar para después de la QH.