martes, 2 de octubre de 2012

POR UNA GOTA

Hace una semana la tierra pedía agua como si de sangre se tratara para alimentar a los pulmones de la vida. Una tormenta de verano y de pronto el agua fluye por todos sitios arrasando sin piedad todo lo encontrado a su paso.
Un desastre natural que año tras año se repite. A alguien se le olvidó que para el buen entendimiento entre la tierra y los hombres, hay que respetar los margenes prehistóricos por donde un día el agua fluía sin más impedimento que las propias condiciones naturales.
La noticia es cabecera de todos los noticiarios, como en su día lo fue el terremoto de Lorca. La experiencia nos dice que en unos días, el suceso sólo será recordado por los que lo han vivido en sus carnes. Algún ave de rapiña, sacará provecho de la desgracia ajena. Los créditos prometidos jamás llegarán y de nuevo volveremos a sufrir el bombardeo diario de la independencia de los no conformes.

En lo deportivo, por fin recobré la senda de la cordura. Alejado de la competición, ahora toca recuperar al cuerpo para próximos acontecimientos. Entrenamiento diario, control de esfuerzos y nada de darle al organismo más de lo que pueda soportar.

Los resultados los veremos a meses vista, aunque por lo experimentado en la temporada pasada, una buena preparación es la base para buenos resultados.-







1 comentario:

  1. Que razón tienes, construimos y construimos y no nos damos cuenta o no queremos darnos cuenta de respetar los caminos naturales del agua.

    Respecto a los entrenos, recuerda arquear mas la espalda con el balón ��

    Un saludo (Marcos)

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