FIN DE SEMANA CASI PERFECTO

Días, semanas, meses de entreno y apenas 7 segundos para una prueba y poco más de veinte para otra. David, Angel y Charly se enfrentaban a la primera prueba en pista de la temporada. Lejos quedaban los controles de marcas y las sensaciones cruzadas. Era el momento de darlo todo y el resultado fue aún mejor de lo esperado.
David mordió metal y se colgó el tercer puesto en el 200. Si alguien se merecía, por fin, un buen resultado era él, ya que debido a una u otra circunstancia, siempre se le había resistido aún con méritos sobrados para lograrlo hace tiempo.

Charly estuvo en su linea, bien, pero con capacidad para mejorar muchísimo más. Ángel, muy cómodo, haciendo muy buenos cronos, dejándolo con la punta de gas necesaria para el Campeonato de España de Veteranos a celebrar en un mes.
Lo único negativo, fue la la ausencia de Óscar, el cual una lesión inoportuna e imprevisible, en el último control de marcas, lo ha dejado en el dique seco cuando mejores tiempos estaba realizando.
Una vez pasada la borrachera de éxitos del sábado, el colofón debería ponerlo yo en el campeonato de Du-cross del domingo.
Las sensaciones por fin, eran buenas antes de la carrera. No quería dejar nada al azar. Sabía que el sector de mtb me resultaría muy duro, por lo tanto tendría que apretar de lo lindo en los otros dos sectores a pie.
Para ello, no dudé en preparar mis Fastwitch de las grandes ocasiones, para el envite.
Todo estaba preparado, los músculos activados, silbato y allá que salimos todos como si el alma nos fuera en ello.
Como el circuito era conocido del año anterior, poco me preocupaba que los más rápidos en distancias cortas, sacaran unos escasos metros en la salida. Los continuos repechos, tramos de fuertes subidas, bajadas y tierra, pondrían a cada uno en su sitio en el momento justo y necesario. Y así fue, poco a poco fui tomando posiciones lógicas y pasando a aquellos que por tiempos están detrás de mis cronos. Era mi primer sector y tenía que darle fuerte para sacar el mayor tiempo posible y que perdería en el segundo sector de bici.
Transición rápida y allá que me lanzo con la Orbea Alma. Llevo delante a Rubén, que a la postre se proclamaría campeón de Extremadura Absoluto. Veo que toma precauciones en la primera curva y me marca el camino a seguir en los primeros metros. Cuatro vueltas a un circuito con continuos cambios de ritmo y algunas zonas duras mezcladas con mucha gravilla suelta. Mi objetivo, perder lo menos posible y sobre todo no caerme, aunque un despiste con una baliza estuvo a punto de dar con mi cuerpo contra el frío suelo del Parque del Príncipe. Unos segundos perdidos, pero afortunadamente sigo con la verticalidad. Van pasando los metros y aunque pierdo tiempo en los giros cerrados, en las subidas y bajadas hecho el resto. Algunos me adelantan, pero ya cuento con eso, pronto llegará lo bueno.
Segunda transición, y allá que me lanzo a por los que tengo delante. Mis sensaciones cambian, y del sufrimiento extremo de la bici, paso al placer supremo de las largas zancadas a pie.
Una larga bajada hace que mis gemelos recobren frescura. Para entonces sin apenas esfuerzo, ya he pasado a algún solitario contrincante. Ahora mi meta está en alcanzar a aquellos que en el cambio de bici me sacan más de 30 segundos. La misión, por la lejanía de los corredores, se prevé imposible, pero por esfuerzo no va a quedar. Comienza el tramo fuerte de subidas y zona técnica. Poco a poco el lactato va dando la cara, pero estoy acostumbrado a esta fase de la carrera, solo tengo que aguantar lo justo para no bloquearme. A unos 700 metros, y en el tramo más duro del segmento a pie, alcanzo al que a la postre quedaría segundo de mi categoría. Sus esfuerzos por intentar seguir mi ritmo se convierten en agua tibia en desierto lejano.
El siguiente lo tengo a tiro, pero la meta se acerca y no logro recortarle lo suficiente.
Objetivo cumplido, Campeón de Extremadura Du-cross categoría veteranos. Carrera muy buena y a descansar mental y físicamente, que por esta ocasión nos lo hemos merecido.